sábado, marzo 07, 2009

Una Historia A LO PARQUE



Viaje al torneo Vendimia 2009
(Juvenil Masculino) – Maipú de Mendoza

El 2009 empezó con viaje. En plena pre-temporada con el equipo de juveniles varones partimos para Maipú (Mendoza) al torneo “Vendimia”. El plantel fue reducido, contando con los siguientes jugadores: Maximiliano Lehder, Franco Ompré, Nadir Asis (Nadito), Martín Tártara (Tincho), Federico Puebla, Nicolás Zampolini, Francisco Lentini (Santa), Micael Castagnet (……..) y Nicolás Romero (El Carnicero), que se sumó un día después recién recuperado de un estado gripal. Salimos el jueves 26 a las 22 hs desde la terminal, en coche cama con servicio a bordo (un lujo), para llegar a las 7hs del viernes a Mendoza; desde ahí en una trafic hasta el polideportivo de Maipú. Nos instalamos, descansamos y nos preparamos para el primer encuentro a las 15 hs.
El primer rival fue Universidad de Cuyo al que le ganamos 18-14, destacándose en ataque nuestro lado derecho de la cancha (Mica y Tincho con 13 goles), una defensa muy sólida y un arquero con todas las luces.
El sábado nos levantamos temprano (con la llegada de Nico Romero) y nos preparamos con mucha tranquilidad y concentración para el encuentro con Tupungato (Mendoza). El día anterior habíamos estudiado a este rival que se mostraba muy rápido, con un juego profundo y muy buenos fundamentos individuales; y con el jugador Nº 4 como su principal vía de gol.
Al inicio Parque no dio concesiones, con una defensa muy despierta y un contragolpe contundente (Tincho y Santa asistidos por Nico Z y “El francés” Lehder”). Al final del partido estábamos 5 goles arriba y Tupungato se jugó sus últimas fichas, saliendo a hacer una personal en toda la cancha, aprovechando su plantel largo y resto físico. Faltando 7 segundos y ganando por la mínima diferencia, Federico cortó una contra y se ganó la roja. El tiro libre era cercano a los 9m al centro de la cancha. La orden del árbitro puso el reloj en marcha y los rivales llevaron la pelota hasta la punta izquierda donde aprovecharon la diferencia numérica para lanzar desde 6m. A 3 seg. el puntero izquierdo de Tupungato saltó, esperó al arquero y eligió colgarla por sobre éste al segundo palo; no contaba con la altura, velocidad y picardía de Maxi “El Francés”, que con un salto tomó la pelota entre sus dos manos dándonos el pase a la ronda final. La chicharra congeló a Tupungato y los de Parque explotamos de alegría. Ya estábamos entre los 3 primeros.
Luego del trabajo regenerativo almorzamos y fuimos a descansar en el albergue. Los chicos estaban muy cansados pero eufóricos por el merecido triunfo. Hicimos una sesión de relax y masajes, y una siesta corta. El partido que seguía era contra el local, al cual también habíamos observado (en realidad habíamos estudiado a todos los equipos, en especial a los de Mendoza, que se presentaban como los de mejor nivel).
Maipú tenía como principal arma a su jugador Nº 11, de condiciones sobresalientes, pero poco dispuesto a participar del juego al resto de sus compañeros. Esto marcó nuestro posicionamiento defensivo en una 5-1 con el adelantado (Santa, clásico perro de presa) intentando que ese jugador no recibiera el balón.
Y comenzó el partido, o al menos Maipú… Parque estaba en cancha pero parecía ausente. A los 10 min. de juego y con un parcial en contra 6-2 pedí minuto, para intentar infundir un poco de ánimo y concentración a los verdes. Logramos controlar al rival que tampoco mostraba un gran juego y nos fuimos al descanso con un 8-8 con más interrogantes que respuestas. Estábamos empatando casi sin jugar, lo que por lógica nos decía que si nos concentrábamos el partido era nuestro. Y así fue… Arrancamos el segundo tiempo con todo, 7 jugadores concentrados que tiran para el mismo lado hacen la diferencia. La marca impecable, la contra certera, un juego sin errores, una excelente selección de tiros y nuestro gran, gran arquero “Francés” le pusieron el broche al partido ganando por 3 de diferencia.
Sólo nos quedaba un partido, un partido muy duro por las condiciones del rival (Regatas de Mendoza) y por el desgaste de nuestro plantel, que sólo tenia 2 cambios posibles en el puesto de puntero. Nuestros armadores y pívot arrastraban 150 min. ininterrumpidos de juego. Pero eso no es excusa, Parque estaba en cancha y los chicos se hicieron cargo. Desde el comienzo del partido Regatas demostró un gran nivel con una defensa muy dura, que no mostraba fisuras, y tres armadores que en ataque hicieron mucho daño, por sus veloces fintas, penetraciones y sus lanzamientos a la carrera. El parcial finalizado el primer tiempo 13-6. El segundo tiempo fue más de lo mismo y nuestros jugadores acusaban los cuatro partidos sin descanso. Cuatro partidos en tres días contra equipos mendocinos de muy buen nivel no es poca cosa. Resultado final 32-22 para un Regatas contundente. ¿Sabor amargo para Parque? Un poco si al principio… a nadie le gusta perder la final después de tanto esfuerzo. Pero nos relajamos y haciendo un balance de lo vivido en esos tres días, levantamos el ánimo y surgieron las ganas de seguir para adelante, entrenando, viajando, aprendiendo y disfrutando de este hermoso deporte que hemos elegido.
Como experiencia social voy a tratar de sintetizar, ya que necesitaría 100 páginas al menos para relatar todo lo vivido en estos días. Sólo quiero dar las gracias a la gente de Maipú, que de ser anfitriones conocen mucho y le ponen toda la onda; al Tano y al Pelado Fontana que allanaron el camino para que el viaje se pudiera hacer; al Checho por su excelente trabajo de preparación física y a los PROTAGONISTAS (si con mayúscula) de esta historia, a los flamantes juveniles de parque de los que cada día aprendo un poco más el significado de palabras como amistad, compañerismo, compromiso, alegría. ¡Que fácil se hace ser profe y entrenador cuando la materia prima es de primer nivel! Los felicito y… ¡Nunca pierdan eso tan lindo que tienen!


Alfonso José Ayen
Técnico Div. Inferiores Masc.
Club Atlético Barrio Parque

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